En mi casa estaba encendida la televisión, y en las noticias se hablaba del nivel de estrés que tenemos los chilenos. Impresionantemente, este porcentaje llegaba al 80% siendo una de las principales razones de las licencias medicas emitidas por los trabajadores en el país. A raíz de esto se hablaba de los medicamentos que se podían utilizar para el estrés, y me pregunté, ¿por qué las personas recurren a elementos externos para solucionar los problemas internos, cuando la solución la tenemos nosotros mismos? Mi respuesta inmediata fue que muchos entonces no conocen los beneficios del yoga en la parte interna, lo ven solamente como un ejercicio físico, cuando la realidad es que el yoga es espiritualidad.
Hacemos Asanas para avanzar en el camino espiritual, para centrar nuestra mente y calmarla, para vivir en nuestro presente, en el real presente (no en aquel que piensa qué hay que hacer después), para ir puliendo y avanzando en nuestras capas internas, para encontrarla felicidad y el contentamiento que es lo que nos falta.
Con esto quiero decir que los medicamentos no son la solución a nuestro estrés, la solución es tener un espacio real con nosotros mismos, escucharnos, escuchar a nuestro cuerpo y permitirle vivir. Permitir que la vida esté en su presente sin preocupaciones, sin distracciones, solo vivir y disfrutar del ahora.
Por lo tanto, los y las invito a realizar Yoga, partiendo con las asanas, más adelante el cuerpo y la mente pedirán tranquilidad y se seguirá avanzando hacia la meditación, y notarás como tu cuerpo va mejorándose y agradeciéndote que estés dedicando un tiempo solamente para ti.
Abrazos eternos para todos!
Namasté.